El lienzo que aquí contemplamos es una de las
obras más famosas del pintor de Delft. La bella muchacha recorta su busto de perfil
ante un oscuro fondo neutro, girando la cabeza para
dirigir su intensa mirada hacia el espectador. Su boca se abre
ligeramente, como si deseara hablar, dotando así de mayor realismo a la
composición.
La joven viste una chaqueta de tonalidades
pardas y amarillentas en la que sobresale el cuello blanco de la camisa,
cubriendo su cabeza con un turbante azul del que cae un paño de intenso
color amarillo, creando un contraste cromático de gran belleza. La gran
perla que le ha dado nombre adorna su oreja, recogiendo el brillante
reflejo de la luz que ilumina su rostro. En el fondo
oscuro, la figura de la joven destaca como un fondo de luz y de pintura,
o mejor dicho, de pintura hecha luz.
¡Hola!
ResponderEliminarSoy Laura y...¡conseguí el internet! Y que mejor opción que entrar en nuestro blog y comentar en entradas pasadas. ¡Qué mejor! Así que he decidido comentar aquí porque...:
-Me parece muy bonito este cuadro.
-Es increíeble como Vermeer, pinta todas las sombras, las mezclas...
-Y...¡que cuadro! Es:bonito, grande, tiene una peli, guapa...
¡Y...qué decir más!..., ¡es una preciosidad!
Un saludo de:
LAURA VILLALBA NAVAS 5ºA
¡Holaa! Soy Nerea.
ResponderEliminarOs voy a comentar sobre el cuadro de: la joven de la perla.
- Me ha parecido muy bonito.
- Es increíble como Vermeer, puede mezclar todos los colores y poder hacer ese cuadro tan maravilloso.
- Es realmente... ¡ precioso !
Pues que me ha gustado mucho.
Un saludo de :
NEREA MÁRQUEZ MARMOLEJO. 5° A.